Un habitante del sector contó detalles de cómo se registró el hecho.
Hay dolor en el barrio Galán de Barranquilla tras el crimen del Fiscal 30 Local, Norbey Ruiz Correa, de 50 años.
Habitantes de la zona lo recuerdan como una persona “de bien y con buenos modales”.
“Para todos nosotros es un impacto grande porque era una persona querida de toda la comunidad, pequeño, grande y viejo”, expresó don Pedro, conocido de Norbey, el cual lleva más de 20 años viviendo en la zona.
El adulto expresó que el fiscal acostumbraba a llegar en las tardes al sector donde lo vio por última vez cuando llegó en su carro.
“Él llegaba en las tardes y a veces se reunía ahí y raro que ayer no había casi gente. Yo estaba sentado en la mecedora cuando escuchamos los disparos”, manifestó.
Dijo que los momentos fueron angustiantes, pues toda la gente salió corriendo a donde estaba el fiscal tirado y donde lo auxiliaba su familia.
“Lo recordamos como una persona amable, servicial y sencillo. Era un profesional que no te iba a esquivar si tú le preguntabas algo sobre la rama de la judicatura porque él siempre respondía, él no era grosero. Cada vez que salía nos saludaba, me decía buenos días, don Pedro”.
El vecino del fiscal aseguró que es la primera vez que pasa algo en su sector.
Ataque contra el Fiscal
El crimen del Fiscal Norbey Ruiz Correa se registró la tarde del miércoles cuando llegaba en su vehículo a la vivienda donde residía.
Una cámara de seguridad de su inmueble captó el momento en que abrió la puerta del vehículo, quedó buscando algunas cosas en su interior y allí fue cuando un delincuente se le acercó a pie para intimidarlo con arma de fuego con el fin de despojarlo de sus pertenencias, mientras que un cómplice esperaba en una motocicleta.
En el video se observa el forcejeo que sostiene el fiscal con el ladrón, quien posteriormente le disparó directo a la cabeza al funcionario, quien cayó al suelo una vez salió del automotor.
El delincuente corrió hacia donde su cómplice y huyeron a toda velocidad.
Familiares del Fiscal lo auxiliaron y lo llevaron al Hospital Universidad del Norte, donde se confirmó su muerte.
Ante el crimen del funcionario, las autoridades ofrecieron una recompensa de hasta 40 millones de pesos por información que dé con los responsables de su muerte.
