El técnico del Junior resaltó el triunfo obtenido, después de casi 10 años, contra Boyacá Chicó, en Tunja.
Tres puntos que valen mucho, porque se lograron en la altura ante un rival que fue complicado, calificó el técnico del Junior, César Farías, el triunfo 2-0 de Junior sobre Boyacá Chicó, el martes en Tunja.
El venezolano recordó el dato estadístico que reseñaba que Junior acumulaba casi 10 años sin ganarle en esa plaza al cuadro ajedrezado para medir el grado de dificultad que representa para su equipo jugar allí.
«Los tres puntos valen mucho, creo que pasa a ser un arranque importante para nosotros, esto nos acerca a los puestos de arriba. Conozco bien la altura y conozco las dificultades del que viene del nivel del mar, pero fuimos por el partido y conseguimos los goles. A lo largo del partido tuvimos unos picos de ahogo grandes, pero, sin embargo, con el carácter y con el orden pudimos resistir y después, cuando el partido se puso más difícil, porque quedamos con 10, pudimos defender bien, nuestro arquero estuvo muy bien y pasamos los sofocones que produce el rival y que produce la altura», dijo Farías en rueda de prensa.
El 17 de mayo de 2015, cuando se impuso 2-0 con goles de Roberto Ovelar, había sido la única vez que Junior le había ganado al Boyacá Chicó, en Tunja, pero ya Farías presagiaba que su equipo estaba cerca de sumar su primer triunfo como visitante bajo su mando.
«Ya en Santa Marta tuvimos la sensación que habíamos podido ganar, sabíamos que estábamos cerca de una victoria de visitante, se dio y ahora mantener los pies en la tierra a invitar a toda la gente para el lunes en Barranquilla (contra Envigado)».
Farías reconoció que los últimos resultados de Junior, el empate contra Unión en Santa Marta y los triunfos sobre Once Caldas y Boyacá Chicó, han llenado al equipo de confianza.
«El equipo va en la dirección que queremos para llegar muy bien al partido de marzo de la Copa Sudamericana (contra América), tenemos los focos bien puestos ahí y, además de eso, llegar a los cuadrangulares con piernas, cabeza fresca y en un punto alto».
Además de Santiago Mele, el técnico del Junior resaltó a Bryan Castrillón, que marcó gol por segundo partido consecutivo, y a Javier Báez, quien, desde que entró a jugar, el equipo no ha recibido goles.
«La defensa, a pesar de ser nueva, ha sacado ya cuatro ceros y ya son cinco partidos que no conocemos la derrota, pero creo que los muchachos tienen los pies en la tierra y saben que esto es muy largo. Hoy es un partido que nos hace crecer mucho porque nos tuvimos que defender al final demasiado. Es un punto de entrenamiento altísimo porque es una situación real de juego».
Indicó que el valor de la victoria es mayor si se tienen en cuenta el lugar y las circunstancias del partido, como la expulsión en el segundo tiempo de Didier Moreno.
«Hoy sumamos no solamente tres puntos, sino jugar en la altura, jugar con uno menos, 10 años que no se ganaba acá y también la narrativa de afuera es difícil porque pareciera que estábamos muy mal y hoy se ven las cosas diferente. Vamos por buen camino, pero esto recién comienza», concluyó.